Este también fue un paseo recurrente, el paseo rutero por excelencia. Con un paisaje sobresaliente en el que más de una vez vimos cóndores volando a no más de 10 metros de nosotros.-El inicio como de costumbre era temprano, nos adentrábamos por el Cajón del Maipo para llegar a un Restaurante tipo Quinta de Recreo donde dejábamos las camionetas.
Ahí eran imperdonables, antes del pedaleo, una buena tasa de café con huevos revueltos y pan amasado, 
después de eso empezábamos el pedaleo con bastante dificultad.
Creo en esos lares nacieron las competencias por hacer los relatos más increíbles, verdades y mentiras iban y venían, como ese que contó Caco, de un amigo que paro en Lampa viniendo en viaje desde Morrillos en una Kleinbus para que hicieran pipí y dejó a la señora en medio de la carretera.....en camisa de
Gonzalo
1 comentario:
Cuñao, estoy muy contento con tus aportes a este rincón de los recuerdos, ellos están repletos de detalles entretenidos y muy bien descritos. Espero que alguien más se atreva a soltar la muñeca y escriba algunas líneas para sus amigos en este blog.-
Pancho
Publicar un comentario